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dimarts, 8 de març del 2011

Dia de la dona treballadora


TESTIMONI DONA INMIGRANT

Mi  nombre es Jenny, soy de Honduras. Allí estudié administración aduanera, pero no lo terminé, pues decidí hacer un parón en mis estudios. En ese parón decidí irme a trabajar a Suiza, porque tenía allí a mi tía y a mis primos. Estuve allí un año trabajando de limpieza y cuidando a niños. Tenía que ahorrar porque padezco Distrofia Corneal Granular, y en Honduras solo se consigue el dinero de la operación a base de donaciones, y resulta muy difícil reunir el dinero. Tenía que ahorrar en Suiza para poder regresar a Honduras y operarme. Esta enfermedad es hereditaria, y por eso hay varios miembros de mi familia que la padecen, entre ellos mi hermana. Yo sabía que mi papá no podía permitirse pagar dos operaciones, y eso me animó a trabajar y a ahorrar, pues quería afrontar económicamente el coste de los trasplantes por mí misma. 
Después de la operación en Honduras volví a Suiza, pero como allí no me puedo hacer el chequeo de los ojos, decidí venirme a España, donde ya trabaja mi hermana. Llevo ya ocho meses viviendo aquí. Empecé de limpieza en un bar, luego cuidando al hijo de la anciana que mi hermana cuida, y luego la sustituí en sus vacaciones. Mi hermana hace varios años que trabaja en España y lleva cuatro años sin poder ver a sus hijos que están en Honduras con su papá. Esta situación es muy dura para ella. Ahora se me acabó la sustitución y estoy buscando trabajo.
Yo vivo esta situación con ánimo, siento que tengo algo que me anima. Si ha pasado lo que ha pasado es por algo. Me he podido operar, que era uno de mis objetivos, así que he sacado algo muy positivo de la vida. Pero aquí hay veces que se pasa duro. Me arrepiento de haber dejado la carrera. A veces me pregunto qué hago aquí, si en Honduras tenía el apoyo de mi padre, que me pagaba los estudios. Pero vivir aquí también tiene lo positivo de que me ha hecho más independiente. De todos modos no estoy sola, aquí tengo a mi hermana y a mis primos. Lo que más me angustia ahora es ver que los días van pasando, sigo sin encontrar trabajo y me pregunto cómo voy a afrontar los gastos del mes que viene, el alquiler de la habitación…
En cuanto a expectativas de futuro, espero poder pagarme algunos estudios. Me gustaría hacer algún curso de peluquería. Quizás me pueda pagar un curso de geriatría, para formarme en lo que estoy haciendo. Me gusta la gente mayor, me los llego a apreciar, una les llega a tener cariño.
Creo que por el hecho de ser mujer, tenemos más oportunidades en este sector. Somos más condescendientes: podemos ir a trabajar por horas, o de internas, somos accesibles a este tipo de trabajos que otros no desearían.
Cuando me planteo si voy a poder formar una familia, pienso que el trabajar afecta de una u otra manera, ya sea si estás trabajando de interna, o muchas horas con la misma persona. Hay que pensarlo mucho, porque no tendrás mucho tiempo para dedicarlo a tus hijos. Yo le digo a mi apareja que a lo mejor cuando volvamos a Honduras nos lo podemos plantear. O si consigo un trabajo estable aquí.

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